Hoy el Periódico de Catalunya publica un especial sobre la reforma constitucional, con una sección “Siete diputados explican su voto”, yo explico el voto del PSC. Aquí tenéis el texto original del articulo completo, ya que supongo que por temas de edicción han cortado el último párrafo.
A veces en la vida no hay marcha atrás y en momentos difíciles sólo queda tomar las decisiones más adecuadas. Así lo hemos hecho los diputados y diputadas socialistas junto a Rubalcaba, tras conocer la propuesta del presidente Zapatero de reformar la Constitución para incorporar el principio de estabilidad presupuestaria.
El planteamiento del presidente llega tras un turbulento agosto para las economías europeas. Lo único positivo del mes ha sido la reunión de Merkel y Sarkozy, que ha abierto las puertas a una politica economica real, a cambio de garantías y acuerdos.
El modelo de bienestar europeo solo sera sostenible con un acuerdo que nos permita ser suficientemente grandes como para decidir en un mundo global. En el PSC siempre hemos sido europeistas, aun aceptando que más gobernanza europea significa ceder soberanía.
Esta reforma da un mensaje claro de que este país esta en condiciones de hacer frente a sus deudas. Es una garantía para poder mantener el estado de bienestar. Si pedimos menos dinero seremos más libres. Es más de izquierdas defender poco endeudamiento para depender menos de los mercados que nos lo prestan.
El concepto de déficit estructural tiene en cuenta el ciclo económico, no afecta a los gastos ocasionados por las crisis como el subsidio de paro, a diferencia del déficit cero que propone la derecha. En ningún caso se trata de limitar el gasto, sino el déficit. Las políticas de impuestos marcarán el nivel de servicios factibles.
CiU ha aprovechado esta reforma para abrir el debate del modelo de Estado. En un modelo descentralizado en el que las CCAA suponen un 40 % del presupuesto público, un compromiso de contención del déficit no puede excluirlas.
CiU se ha autoexcluido del acuerdo. En el Senado tiene la oportunidad de demostrar que antepone la estabilidad económica de Catalunya y España al oportunismo.
Las formas podrian haber sido mejores en este proceso, especialmente en momentos en los que la ciudadanía reclama más participación y el movimiento 15M tiene especial presencia. Por ello, surge el dilema entre la necesidad de una respuesta urgente por tratarse de una situación de excepción y esta demanda de mayor participación. La cuesitón es: ¿podemos correr riesgos en estos momentos? Creemos que no. Las consecuencias de una intervención serían nefastas para los servicios públicos. Por lo tanto, el sí del PSC a la reforma es la decisión más garantista en tiempos de crisis..